Para el 28 de mayo de 1933, el carlismo valenciano había programado un gran acto tradicionalista en la plaza de toros de Castellón con intervenciones de Alfonso Ibáñez, representante de los tradicionalistas catalanes; Miguel Suria, del Consejo Regional Valenciano y Jefe Provincial de Valencia; María Rosa Urraca Pastor; Jaime Chicharro; José Mª Lamamié de Clairac, diputado por Salamanca y el Conde de Rodezno, diputado por Navarra y presidente de la Junta Suprema Tradicionalista. Ante la magnitud del acto y la gran afluencia de público prevista, incluso se organizaron trenes especiales. El acto fue suspendido pocos días antes de su celebración por orden gubernativa tras la petición del Partido Republicano Radical, Radical Socialista y Socialista de realizar a la misma hora una manifestación de protesta contra la intensa propaganda tradicionalista. Dicha manifestación no se llevó finalmente a cabo una vez logrado el propósito de impedir el acto carlista. ¡Cosas de aquella República tan democrática y a la que algunos dicen añorar!
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